Similar al pariente incómodo, un entorno con malos aromas
puede ahuyentar hasta tus amigos más cercanos. Posiblemente la siguiente
reunión propongan otro sitio para no perder la amistad…
La casa puede ser un imán para conservar aromas, a los que
nuestras glándulas olfativas se acostumbran por saturación y familiaridad. Si
has entrado a casas de conocidos con mascotas, la firma territorial del animal
puede no molestar al dueño pero cuesta un poco de trabajo a las visitas. Un
caso similar es con muebles y espacios cerrados que no han sido lavados en
cierto tiempo; los olores pueden ser penetrantes y chocantes a los desconocidos
pero nosotros necesitamos irnos de vacaciones y regresar para detectarlos.
Ahora pues, ¿cómo reivindicarnos y ser grandes anfitriones
en todo sentido?
Entre las principales opciones está el resolver problemas
de raíz, que es detectar los generadores de malos olores y ponerles especial
atención para que no contribuyan negativamente a la suma de aromas de la casa.
Baños a las mascotas con más regularidad, poner zapatos a ventilar, no dejar
basura en la casa por mucho tiempo (principalmente alimentos) y dar limpieza
los muebles son algunas cosas que nos resolverán buena parte del problema.
Otra razón por la que la casa puede albergar malos olores
es que el aire no cicla lo suficiente, cosa que se puede resolver al abrir
ventanas y puertas durante el día para que el aire “viejo” salga y entre aire
nuevo. En cuanto a sitios cerrados, funciona también tener la rutina de abrir y
cerrar puertas un par de veces para que se renueve el aire que está atrapado.
Ahora, en cuanto a soluciones para contribuir y dar un
toque diferente a los aromas naturales del hogar, están los aromatizantes que
puedes comprar; la desventaja que tienen los sprays es que el rociar zonas dura
un momento y se volatiliza, no hay manera que permanezcan flotando en el
ambiente y su poder de fijación no es tanto, por lo que no importa si rocías
superficies para que dure más tiempo, el aroma termina por esfumarse.
Otras soluciones son los sistemas difusores, pues a
sabiendas que los aromas duran un momento, el sistema rocía esencias aromáticas
en periodos programados, para que la firma del aroma esté siempre presente. A
diferencia de los aromas genéricos que puedes encontrar en tiendas, los
proveedores de sistemas de difusión aromática tienen catálogo y mezclas que
puedes estar cambiando mes con mes, o en preparación para eventos especiales.
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