Hoy
en día estamos saturados de cosas por hacer y comienzan a surgir padecimientos
que nuestros padres nunca oyeron nombrar como el síndrome de burn out que es un trastorno emocional
estrechamente ligado al ámbito laboral y que tiene consecuencias muy graves
tanto a nivel físico como psicológico.
Este
síndrome se caracteriza porque las personas presentan depresión y ansiedad y
sus efectos pueden trastornar todas las situaciones personales y profesionales
que rodean a quien lo padece.
El
entorno laboral, altos niveles de estrés, carga de trabajo excesiva, poca
autonomía y las relaciones con compañeros de trabajo desembocan en este
síndrome. Es una enfermedad de nuestro tiempo.
Pero
no podemos dejar de trabajar ya que cada vez es más difícil sostener un tren de
vida adecuado a nuestras necesidades y las de nuestra familia. Por esta razón
se han disparado las visitas a profesionales de la salud mental y se ha
incrementado el consumo de fármacos para paliar estos síntomas.
Pero
existen formas más sanas de lidiar con los molestos síntomas del estrés, por
ejemplo, la aromaterapia. Las cosas que olemos tienen una influencia poderosa
sobre nuestras emociones y estado de ánimo, esto es porque es un sentido con
fuertes conexiones neuronales que también ayudan a fijar los recuerdos en
nuestra mente.
Cuando
un espacio tiene un olor agradable se queda en nuestra memoria. Si es un
espacio comercial, seguramente vamos a querer regresar pronto, aunque
conscientemente no sepamos que es por el aroma de dicho lugar. En nuestra casa,
un olor agradable nos ayuda a relajarnos, a convivir con armonía y a sentirnos
mejor a pesar de los efectos nocivos del estrés.
Aromas
como Naranja, limón, lavanda, bergamota y menta favorecen un estado de calma,
libre de ansiedad y con una energía alegre y dinámica. Para dispersar estos
aromas en el hogar es buena idea adquirir un difusor de fragancias profesional.
Un
difusor de fragancias es un aparato en el que se vierten los aromas y son
dispersados cada tanto tiempo en casa manteniendo la fragancia de manera
uniforme. Los beneficios de tener un difusor en casa son muchos. Algunos
ejemplos de ello son:
1. Reduce la ansiedad.
2. Fomenta la calma.
3. Aumenta la concentración.
4. Reduce el estrés.
5. Modula el estado de ánimo.
Un
difusor es un maravilloso regalo para nuestra familia y es sin duda una
inversión inteligente por el bienestar familiar. Contacta a Fridman's para comprar difusor de aromas para las personas
que más quieres y ayúdalos con su día a día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario