lunes, 4 de abril de 2016

¿Qué aroma elegir para mi marca? ¿Cómo le hacen para tener un Aroma especial en una tienda?

Antes de responder a esa pregunta, hay que preguntarnos primero: ¿Usas cualquier perfume para salir de fiesta? ¿Qué pasa con un desayuno con amigas? ¿Uso el mismo? Es posiblemente sí, aunque algunas personas eligen un aroma según la ocasión, algo más fuerte y vivo para un baile, otro más discreto para una reunión de trabajo.

Regresando a tu persona, sin importar la ocasión, no te identificas con cualquier fragancia. Raras son las personas que eligen un aroma a detergente como su sello y seguramente no estás entre ellas; un aroma es una declaración, sutil o vibrante, que nos hace saber de ti y tus gustos.

Cuando buscas un aroma que te identifique, por lo general se tiene una expectativa: que al ponerte ese perfume te haga sentir de una manera especial. La seguridad que deseas proyectar, el glamour y belleza de tu interior, como una manera de aumentar tu presencia y dejar una memorable impresión en las personas con las que interactúas.

El proceso para elegir un aroma que defina lo que tu tienda es pasa por un proceso similar. Primero se definen los detalles del resultado que se busca, para crear la personalidad olfativa:

  • ¿A qué público deseas llegar? Un dicho de marketing aplica: si es para todos entonces es para nadie.
  • De ese público objetivo, ¿qué es lo que buscan de la experiencia de compra? Algunos pueden ser el reafirmar estatus, relajación, incluso emociones fuertes.
  • ¿Qué variables en la atmósfera que vamos a crear pueden reafirmar las creencias y expectativas de tus clientes respecto a la experiencia de compra? En este punto, el experto diseñador de ambientes puede hacer sugerencias: una combinación de cítricos y frutas de bosque para un público jóven que quiere pasar una buena velada, maderas e incienso para calmar nervios y promover la concentración en un café.
  • ¿La atmósfera creada podrá competir efectivamente con lo encontrado en la competencia? Habrá que estar atentos a las reacciones con aromas candidatos y quedarnos con los que logren prolongar el tiempo que permanecen en la tienda y mejor aún, los que reflejen mejores resultados en ventas.







Fuente: Atmospherics as a marketing tool. Philip T. Kotler

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