En un viaje al súper lo normal es recorrer pasillos flanqueados por hileras enormes de productos etiquetados en rojo o amarillo, mientras que en las bocinas de la tienda suena algún jingle de una reconocida marca de atún enlatado... La realidad es que todos los compradores estamos familiarizados con algunas técnicas que involucran el uso de ciertos colores y sonidos para estimular la decisión de compra.
Sin embargo, al sentido del olfato, que es muy poderoso en la creación de memorias, también es un aliado importante para los negocios porque tiene la capacidad de motivar la toma de decisiones y lograr una venta, además de crear una atmosfera placentera y lealtad de marca.
El aromarketing, en pocas palabras, consiste en el estudio, desarrollo y aplicación de aromas que puedan mover a los clientes a hacer una compra y a mejorar el ambiente laboral de un negocio y oficina. El aromarketing es parte del marketing sensorial, que es una estrategia que apela a los sentidos para crear experiencias y lograr ventas. Como puede deducirse de lo anterior, esta estrategia de mercadotecnia apela a las emociones, no a la razón.
Aumentar las ventas a través del uso de olores no es una estrategia mágica, sino algo delicado que se debe hacer con cuidado. Por esto, antes de comenzar a rociar tu negocio con tu fragancia favorita, tienes que tener en mente una serie de consideraciones.
En primer lugar, debes definir bien tus objetivos. Quizá deseas que la gente permanezca más tiempo en tu tienda para que vea con calma tus productos, o, tal vez, lo que quieres es establecer lealtad de marca, o, inclusive, lograr que las personas relacionen tu tienda con determinado olor…
En segundo lugar, tienes que considerar a tu público. Abercrombie & Fitch, dirigida a adolescentes y adultos jóvenes, empleó el aromarketing durante años y utilizó una de sus propias colonias para aromatizar sus tiendas. Esta loción, llamada Fierce, fue altamente popular entre los estudiantes de preparatoria y Universidad y tuvo la capacidad de marcar las memorias juveniles de toda una generación de estadounidenses.
En tercer lugar, debes definir tu aroma. Si vendes productos de cuero, no es necesario que aromatices tu tienda con alguna sustancia que huela a cuero, sino con una esencia que cree emociones positivas. Cada esencia tiene efectos distintos en las personas, por lo que quizá lo más útil sería acercarte con un profesional que pueda asesorarte sobre la mejor opción para tu negocio.
Por último, es muy importante qué consideres cuál es la mejor forma para difundir el aroma en tu negocio: de manera manual, con difusores automáticos…
Si tu competencia ya utiliza aromarketing, es muy probable que esté vendiendo más que tú. Aprovecha esta técnica de mercadotecnia para lograr más ventas y aumentar tus ganancias, usa un Difusor de Aromas.
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