En algún momento las
marcas solo se preocupaban por enviar su mensaje a los consumidores de forma
masiva en una sola vía, sin importar mucho si había respuesta o no. En la
actualidad, consecuencia de estudios de mercado y del consumidor, se han
abiertos canales de comunicación de dos vías, en los que participan activamente
marcas y consumidor. Se ha llevado la comunicación con los clientes a un nivel
mas íntimo y personal, por esto es qué ya no se trata solo de lo que dices, es
importante que las marcas cuiden cómo lo dicen, cuándo lo dicen, a quién se
dirigen y por qué.
Para una comunicación
eficaz, resulta crucial el contenido relevante y de valor, que realice
diferenciación de la competencia en el consumidor, y que este contenido esté
construido bajo las premisas que dieron forma a la marca, es decir, la suma de
cada acción de mercadotecnia que se implemente como marca generará una
personalidad ante el público, por ello es importante pensar bien lo que se
quiere comunicar, para mantener un lenguaje coherente y entendible en todos los
mensajes y canales de comunicación.
Algo debes tener
presente siempre: ¡Estamos en el negocio de las personas! Las marcas las
conforman personas y se comunican con y entre personas, las atienden personas y
son personas quienes proveen de insumos para la correcta operación de las
organizaciones. Si bien, una sola persona no representa a toda la marca, cuando
la marca se comunica debe hacerlo bajo una estructura de conversación única y
típica de una sola personalidad. Si está bien construida la personalidad de tu
marca la hará resaltar, sentir individual, única y distinguible del resto de
los competidores.
Para construir la
personalidad de tu marca debes incluirle los beneficios y valores que esta
posee. Al hablar de beneficios nos referimos a los aspectos tangibles e
intangibles que una marca puede ofrecer a sus consumidores. Sobre los valores,
por otro lado, hacen referencia a la forma de ser de la marca. Ya con los
beneficios y valores seleccionados y enlistados es importante priorizar por
aquellos que queremos resalten en nuestro mensaje hacia los clientes,
ordenarlos según los que supongan un mayor énfasis en lo que la marca quiere
expresar y trasmitir.
Para establecer la
personalidad de tu marca es básico que definas a quién irán dirigidos tus
mensajes y cuál es el perfil de tus clientes potenciales. Con base en esto,
podrás elegir tanto los canales de comunicación, como las palabras y el tono
que darás a tus mensajes. Recuerda que no es lo que dices, sino cómo lo dices.
Puedes agregar
reforzamientos al momento de enviar tu mensaje para impactar a profundidad al
consumidor, una estrategia infalible es la de estimular los sentidos del
cliente al momento que recibe tu mensaje. Hay estudios que comprueban que entre
mas sentidos utilicemos al realizar alguna actividad, mayor es el porcentaje de
retención que tenemos sobre dicha actividad.
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